CRUDA 1

¿Nunca les ha dado una cruda?

A mi sí.
He tenido malestares después de excesos de muchas cosas, pero nunca de alcohol.
En este primer post les contaré las cosas que me dan cruda.

CRUDA DE AMAR

Usualmente lo entregamos todo, o casi todo; invertimos tiempo, esfuerzo, alegría, sexo, sonrisas, películas, juegos, lágrimas, caricias, miradas, palabras. ¿Qué pasa cuando se acaba? terminamos extrañando todo, hasta los encabronamientos ¿no les pasa? es como acostumbrarse a andar por la vida con pantuflas (a veces agradecemos que su suavidad nos proteja del piso frío y otras maldecimos que no nos dejan correr, pero igual las amamos).

Cuando dejamos de amar, usualmente hay una cruda que incluye el extrañar sustituyendo al dolor de cabeza y un temporal catatonismo (figurativo claro); éste estado a algunos nos dura días, a otros años.

La cruda de amar no desaparece paulatinamente como la de alcohol, ya que a veces regresan las molestias y en ocasiones regresan mas fuerte cuando nos enfrentamos a otra oportunidad de amar; los médicos indican que contra el miedo lo único que se puede hacer es arrojarse al vacío de amar nuevamente, sólo así se cura. Lo peor que puede pasar es que dejemos de amar también a esa otra persona y que lo intentemos de nuevo.

Amar puede llegar a ocasionar algunas molestias, pero vale tanto la pena como para asumir los riesgos; cuando uno ama y es amado muchas cosas adquieren sentido.
Aunque no recomiendo esta cruda, apoyo 200% el equiparse de paracaídas para dar el salto de amar.
Yo ya me lo puse.